Infinidades de quejas se han dado de vecinos de barrios y colonias de la capital, referente a la sobrecarga en postes de alumbrado eléctrico (en los de madera y cemento). Algunos por el sobrepeso, tienden a inclinarse y convertirse en latente peligro para transeúntes y casas en sus cercanías. Tanto las empresas estatales y privadas que todos conocemos, tienen esta tendencia, dejar rollos de alambres en los postes, como que no tienen bodegas para este sobrante. A las empresas públicas, propongan darle otro fin utilitario a este sobrante. Véndanselos cómodamente a los emprendedores, y éstos le darán -con sus habilidades- otros usos. Aparte de lo anterior, deberían eliminar muchos cables de conexiones viejas que han sido reemplazadas. Eliminando tanto alambre innecesario, tal vez así, la compañía cinematográfica patrocinadora del “Hombre Araña” nos visite y haga algunas escenas de película en Honduras y daría chamba a muchos hondureños como extras.
Juan Manuel Aguilar Flores
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Col. Kennedy