La zona norte de Honduras, enfrenta una nueva crisis tras las fuertes lluvias provocadas por una cuña de alta presión que ha provocado el colapso de varias vías de comunicación, dejado comunidades incomunicadas y cobrado la vida de una mujer en Sabá, Colón.
En San Pedro Sula, Cortés, el tráfico se tornó crítico entre Chamelecón y Cofradía, extendiéndose hasta Naco.
Las condiciones deterioradas de las calles, sumadas a varios accidentes viales, dificultaron aún más el desplazamiento de los conductores.
Mientras tanto, en Atlántida, las autoridades locales cancelaron las actividades marítimas en La Ceiba debido al aumento del oleaje.
La Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) informó que el caudal de varios ríos permanece elevado, aunque hasta el momento no hay personas albergadas.
“Estamos en apresto, monitoreando los ríos y verificando las zonas afectadas. En Jutiapa tuvimos inundaciones, pero la situación se normalizó durante la noche”, explicó Mario Rodríguez, subcomisionado de Copeco en la región.
Por otro lado, Colón presenta daños han sido significativos. En Trujillo, las calles quedaron anegadas y el municipio de Tocoa permanece incomunicado debido al desbordamiento del río Aguán.
Otras comunidades, como Guapinoles y La Concepción, también han quedado aisladas.
La tragedia más lamentable ocurrió en la comunidad de Las Golondrinas, donde Isilda Antúnez Lobo, una mujer de la tercera edad, falleció soterrada cuando una pared de su vivienda colapsó por las constantes lluvias.
Las autoridades llaman a la población a extremar precauciones mientras las lluvias persistan en la región. (ElPaís)