La Catedral Metropolitana San Miguel Arcángel de Tegucigalpa es escenario de una jornada de 40 horas de adoración organizada por la Iglesia Católica de Honduras. El acto, que comenzó este martes a las cinco de la mañana, culminará el miércoles 1 de enero con una Eucaristía solemne programada para las 7:00 p. m.
Durante la jornada, varias parroquias se han unido en oración a través de la celebración de horas santas con la exposición de Jesús Sacramentado. Como parte del cierre, se llevará a cabo una peregrinación con el Santísimo Sacramento por algunas calles de la capital, según el programa de actividades.
El principal objetivo de esta iniciativa es clamar por la paz en Honduras, un mensaje que los organizadores consideran esencial al cierre de un año y en la bienvenida de uno nuevo.
La Arquidiócesis de Tegucigalpa ha señalado que esta tradición de adoración extensa al final del año se ha convertido en un símbolo de fe y esperanza para los fieles católicos, quienes ven en estos momentos de reflexión una oportunidad para renovar su compromiso espiritual y pedir por la unidad y el bienestar de la nación.
La comunidad católica ha sido invitada a participar activamente en las actividades, destacando la importancia de mantener viva esta tradición religiosa.