Tres nuevos módulos penitenciarios serán finalizados en enero y febrero en igual número de cárceles de Honduras, para albergar al menos 3,100 internos informó el director del Instituto Nacional Penitenciario (INP), general Ramiro Muñoz. En un módulo de Ilama, Santa Bárbara ubicarán a 1,500 privados de libertad, en Támara, Francisco Morazán, 1,300 y en la cárcel La Tolva, otros 300 reclusos. “Estos nuevos módulos, se suman a las ampliaciones realizadas en la cárcel de mujeres en Támara, que traerá una nueva clasificación de los privados de libertad” amplió. Según Muñoz, los reclusos serán separados por su condición jurídica y por su grado de peligrosidad, a fin de reducir el hacinamiento en las cárceles hondureñas.
“Aquí ha estado preso el que se robó una gallina, junto con el que se robó 100 millones; el que asesinó con el que se llevó una vaca, entonces no es que los delitos sean menores, pero también hay un grado de peligrosidad en esto”, concluyó.